
La gastritis o inflamación de la mucosa del estómago, además de relacionarse con el consumo de alcohol, también se puede producir por infecciones víricas o por la acción de fármacos anti-inflamatorios no esteroideos (como la aspirina) o los que se usan en el tratamiento contra la bacteria Helicobacter pylori. Las conclusiones de estudio apuntan a que una dieta rica en fresas puede ejercer un efecto beneficioso en la prevención de enfermedades gástricas relacionadas con la generación de radicales libres u otras especies reactivas del oxígeno, atenuar la formación de úlceras estomacales en humanos, y aliviar la lesión en la mucosa gástrica una vez dañada.
“Este trabajo no se ha planteado para paliar los efectos de una borrachera, sino para encontrar moléculas protectoras de la mucosa gástrica frente a los daños que pueden causar diferentes agentes”, subraya Maurizio Battino, coordinador del grupo de investigación desde la Universidad Politécnica de la Marche (Italia).
No hay comentarios:
Publicar un comentario